En el año 2001, la estilista estadounidense Lorraine Massey publicó un libro que supuso el inicio de un movimiento en pro del cuidado natural del cabello rizado, el Método Curly Girl. En este se establecieron las bases de cómo debía ser un rutina para el cabello rizado y qué ingredientes evitar para obtener el mayor potencial del cabello. 

Este movimiento ha ido evolucionando y su objetivo no solo se centra en lograr un rizo bonito, sino que, además, busca aceptar la naturaleza del cabello rizado que tan estigmatizada ha estado a lo largo de los años. 

El cabello rizado, normalmente, tiende a encresparse y a perder hidratación con mucha facilidad, por eso es importante conocer los ingredientes que propician estos aspectos para poder retirarlos de la rutina. Pero no hay que olvidar que cada cabello es diferente, por ello, lo más importante es conocer tu cabello y darle lo que necesita.

Así que, si estás pensando en empezar a lucir un rizo natural, brillante, definido y con volumen te contamos cuál es el paso a paso para lograrlo a través del Método Curly:

PASO 1. DESINTOXICAR EL CABELLO.

Conocido como “último lavado” consiste en eliminar los residuos de nuestro cabello con un champú CON SULFATOS y sin siliconas, limpiando de forma consciente nuestro cuero cabelludo. En medios y puntas empezaremos a hidratar con una mascarilla sin siliconas y finalizamos el lavado con un acondicionador también sin siliconas. 

Después de esta primera rutina tu cabello estará preparado para empezar el Método Curly.

PASO 2.  LAVAR EL CABELLO SIGUIENDO EL MÉTODO.

La principal diferencia de un lavado dentro del Método Curly con lo que estábamos acostumbrados a hacer, es que todos los productos que usaremos son respetuosos con la hebra del cabello y el sebo natural del cuero cabelludo.

Es importante que laves tu cabello tanto como necesites y lo mínimo que puedas, para ello tienes cuatro opciones:

1. Utilizar un champú clarificante. Se trata de un champú con alto poder de limpieza (sin sulfatos ni siliconas) que nos permite retirar acumulación de nuestro cabello o hacer un reset cuando nada nos funciona. 

2. Utilizar un champú lowpoo. Se trata de un champú con poder de limpieza medio (sin sulfatos ni siliconas) que nos permite limpiar la hebra sin resecarla. 

3. Utilizar un co-wash (co: conditioner; wash: lavar). Consiste en utilizar un acondicionador con cierto poder de limpieza. Son acondicionadores formulados especialmente para lavar el cuero cabelludo, por eso es importante que no utilices un acondicionador cualquiera. ¿Cómo utilizarlo? Masajea las raíces y el cuero cabelludo durante unos cinco minutos con el producto, pasado este tiempo acláralo bien.

Esta opción de lavado es muy recomendable para aquellas personas que tengan el cuero cabelludo seco o para aquellas personas que realizan deporte y necesitan lavarse el cabello más a menudo. 

4. Utilizar arcillas y/o plantas. Son la opción más natural de todas. Estas tienen un alto poder de limpieza, pero en comparación con el champú clarificante, no son capaces de retirar acumulación.

PASO 3. TRATAMIENTOS.

En el Método Curly buscamos respetar la naturaleza del cabello ondulado, rizado y afro. Esta naturaleza consiste en agua (hidratación), proteínas y emolientes, que son los tres elementos que constituyen las hebras del cabello. Así que diseñaremos nuestra rutina en base a cuál de estos elementos le falta a mi cabello, lo llamado EQUILIBRIO PHE, y se lo daremos a través de uno de los diferentes tratamientos.

Existe diferentes tipos de tratamientos:

1. Prepoo (pre: antes; poo: champú). Consiste en aplicar, antes del champú, un aceite o una mascarilla. El objetivo de este tipo de tratamiento variará según el producto que utilicemos. Esta forma de aplicar el producto es ideal para asegurarnos que retiramos cualquier exceso de producto que se haya podido generar o para cabellos finos que no quieren aportar peso es sus rutinas.

2. Mascarilla. Consiste en aplicar, después del champú, una mascarilla. Según lo que le falte a tu cabello, tendrás que elegir entre:

- Mascarilla hidratante si te falta agua.

- Mascarilla reconstructora si te faltan proteínas.

- Mascarilla nutritiva sin te faltan emolientes.

3. Tratamientos específicos de proteínas. Consiste en aplicar, con el pelo limpio, un tratamiento con alto contenido en proteínas. Las características de tu cabello serán determinantes para elegir el formato de este.

Estos tratamientos los aplicaremos de medios a puntas, siempre evitando el contacto con el cuero cabelludo.

PASO 4. ACONDICIONAR.

Todos los pasos anteriores culminan con el acondicionado, es decir, acondicionar el cabello antes de salir de la ducha es imprescindible.

De nuevo lo aplicaremos de medios a puntas intentando formar, con ayuda del agua de la ducha, agrupaciones de cabello o ‘algas’. Con el acondicionador puesto y las algas formadas haremos lo que se conoce como STC (squish to condish) o estrujar para acondicionar. Para realizar el STC estrujamos el cabello desde puntas hacia las raíces, el cabello debe hacer un ruido de mojado. Haciendo esto lograremos un cabello más encogido y con más forma. Cuando el cabello deje de hacer ruido aclararemos el acondicionador al 100%.

PASO 5. DEFINIR EL CABELLO.

La definición del cabello es el paso esencial para lograr unas ondas o rizos duraderos. Los productos de la definición dependerán de las características de nuestro cabello, pero podemos distinguir dos pasos:

- Hidratar. Consiste en aportar agua y humectantes extra a nuestro cabello. Podemos hacerlo aplicando:

  • Un acondicionador sin aclarado o leave-in.
  • Una crema de peinado.
  • Una leche hidratante o milk.
  • Un activador de rizos.

- Fijar. Consiste en aportar fijación a nuestro cabello para que las ondas y rizos se mantengan a lo largo de los días. Podemos hacerlo aplicando:

  • Un gel.
  • Un custard.
  • Una espuma.
  • Una mousse. 

Para conseguir una buena definición, es importante que a la hora de aplicar los productos el cabello esté empapado y los distribuimos de manera uniforme por toda la melena. Para ello, podemos usar alguna de las técnicas de definición o ayudarnos de las manos o de un peine.

PASO 6. SECAR EL CABELLO.

Una vez que tenemos el cabello con los productos de definición aplicados, toca secarlo. Para minimizar el frizz o encrespamiento usaremos una toalla de microfibra o de seda o una camiseta de algodón, con la que evitaremos realizar movimientos circulares o que generen fricción. La manera correcta de utilizar sería haciendo scrunch o mulli-mulli, es decir, con la toalla en la mano estrujamos el cabello desde puntas hacia las raíces.

Una vez que hemos retirado el exceso de agua podemos dejar secar el cabello al aire o utilizar un secador con difusor.

PASO 7. PROTEGER LOS RIZOS.

Por último, si queremos mantener en el mejor estado nuestras ondas y rizos, deberás protegerlos a la hora de dormir. Para ello puedes utilizar un gorro de satén, un coletero de satén o una goma de cable.

A pesar de todo esto, puede ocurrir que tus ondas o rizos se vayan deshaciendo por el paso de los días, por la fricción con gorros o por el uso de recogidos. Para reactivarlos puedes refrescar el cabello, utilizando agua o un producto específico.